Revolución o evolución
Bernardo Javalquinto | Fecha de Edición: 07-11-2013
Pronto a las elecciones voy a reiterar algunos párrafos de mis artículos anteriores para ver si alguien tiene la capacidad de reaccionar. En varios países del mundo y en el nuestro en particular, como se habrán dado cuenta, está lleno de personas que dicen una cosa cuando quieren decir otra. Eso se llama doble estándar. A esas personas les falta integridad. Cuando hacen eso se auto engañan porque se faltan el respeto a ellos mismos. La verdad siempre duele, dice el refrán.
Estos problemas de comunicación no siempre nacen de un deseo insidioso de engañar por engañar. Generalmente son en autodefensa, a un miedo de que descubramos su mediocridad. Por otra parte, la sinceridad o verdad resulta en el rechazo. Como ahora se encuentra el país en que nada realmente funciona estamos caminando a través de un campo minado. Más vale interpretar o consultar varias opiniones que mirar a lo que la otra persona está realmente tratando de decir. Porque la realidad esta lejos de ser cierta.
Como todo lo anterior debe ser incomprensible para el común denominador de las personas, solo debemos entender que los principios significan (punto de origen), virtud (hacer que las cosas ocurran), valores (importancia que se le dan a las cosas y sus prioridades), moral (puntos de vista), ética (norma que se aplica a la moral dependiendo de la cultura) y vicios (defectos).
De la manera más humilde en la que podemos pensar, nos da la fuerza para seguir luchando contra las adversidades, grandes frustraciones, decepciones que vemos a diestra y siniestra y que en esta corta y larga vida nos depara, pero cuando existe una causa común, vale la pena el intento. Cuando maduramos y te conviertes en un hombre y/o una mujer, uno deja de lado todas las cosas de niños (algunos). Cuando somos grandes, deberíamos sentirnos privilegiados por la gran responsabilidad que tenemos con los niños y con la educación de nuestros jóvenes, nuestro deber principal es impresionarlos y demostrarles que tendrán que enfrentar dificultades en la vida, pero también tenemos que enseñarles que ellos las pueden superar, enseñarles a no tener un doble estándar y que deben hacer lo que tienen que hacer (bien), para soñar y mostrar que si tienen oportunidades para realizar sus sueños y no como hoy que la mayoría se siente frustrado. La educación es la única manera de salir adelante. Es la salida de la ignorancia, la salida de la obscuridad y la entrada a la luz gloriosa del conocimiento y en especial al respeto a la vida humana.
La vida es un regalo. La gente no se da cuenta, cada momento, cada segundo, cada aliento, cada pensamiento que pasa por nuestra mente, cada sentimiento que brota en nuestros corazones. Es un regalo. Nuestro legado de nuestra experiencia es mostrarles el camino. La juventud, los hijos, la misma vida nuestra es un regalo que lo tomamos como algo cotidiano. ¿Cuántas veces nos detenemos a recordar esto? Solo seguimos adelante con nuestras vidas. Pero se nos olvida a apreciar y disfrutar lo poco que queda de la gente que vale la pena. Despierte y pierda el miedo a tratar con responsabilidad lo que viene. Estos son regalos, también y hay que verlos como tales, en noviembre que es una fiesta a la ciudadanía den su solución para que nuestro país evolucione.
Estos problemas de comunicación no siempre nacen de un deseo insidioso de engañar por engañar. Generalmente son en autodefensa, a un miedo de que descubramos su mediocridad. Por otra parte, la sinceridad o verdad resulta en el rechazo. Como ahora se encuentra el país en que nada realmente funciona estamos caminando a través de un campo minado. Más vale interpretar o consultar varias opiniones que mirar a lo que la otra persona está realmente tratando de decir. Porque la realidad esta lejos de ser cierta.
Como todo lo anterior debe ser incomprensible para el común denominador de las personas, solo debemos entender que los principios significan (punto de origen), virtud (hacer que las cosas ocurran), valores (importancia que se le dan a las cosas y sus prioridades), moral (puntos de vista), ética (norma que se aplica a la moral dependiendo de la cultura) y vicios (defectos).
De la manera más humilde en la que podemos pensar, nos da la fuerza para seguir luchando contra las adversidades, grandes frustraciones, decepciones que vemos a diestra y siniestra y que en esta corta y larga vida nos depara, pero cuando existe una causa común, vale la pena el intento. Cuando maduramos y te conviertes en un hombre y/o una mujer, uno deja de lado todas las cosas de niños (algunos). Cuando somos grandes, deberíamos sentirnos privilegiados por la gran responsabilidad que tenemos con los niños y con la educación de nuestros jóvenes, nuestro deber principal es impresionarlos y demostrarles que tendrán que enfrentar dificultades en la vida, pero también tenemos que enseñarles que ellos las pueden superar, enseñarles a no tener un doble estándar y que deben hacer lo que tienen que hacer (bien), para soñar y mostrar que si tienen oportunidades para realizar sus sueños y no como hoy que la mayoría se siente frustrado. La educación es la única manera de salir adelante. Es la salida de la ignorancia, la salida de la obscuridad y la entrada a la luz gloriosa del conocimiento y en especial al respeto a la vida humana.
La vida es un regalo. La gente no se da cuenta, cada momento, cada segundo, cada aliento, cada pensamiento que pasa por nuestra mente, cada sentimiento que brota en nuestros corazones. Es un regalo. Nuestro legado de nuestra experiencia es mostrarles el camino. La juventud, los hijos, la misma vida nuestra es un regalo que lo tomamos como algo cotidiano. ¿Cuántas veces nos detenemos a recordar esto? Solo seguimos adelante con nuestras vidas. Pero se nos olvida a apreciar y disfrutar lo poco que queda de la gente que vale la pena. Despierte y pierda el miedo a tratar con responsabilidad lo que viene. Estos son regalos, también y hay que verlos como tales, en noviembre que es una fiesta a la ciudadanía den su solución para que nuestro país evolucione.
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