Integridad de los líderes
Bernardo Javalquinto | Fecha de Edición: 13-06-2013
Ayn Rand, decía que "la civilización es el progreso hacia una sociedad de la privacidad. La del salvaje es solo la existencia pública, regido por las leyes de su tribu. Civilización es el proceso de liberar al hombre del hombre".
Mantener el equilibrio puede ser un reto casi imposible cuando la vida parece girar completamente al revés. Pienso que en nuestro país estamos en este punto en que hay algo que nos hace dudar y desconfiar de todos. Personas que deben ir a la UTI, les dan una aspirina y terminan en la sala de emergencia y en cuatro semanas regresan casi moribundas y les dicen que parece que hubo un error. Pero en lugar de ser llevado a donde le corresponde, terminan en cualquier lugar, seas rico o pobre, aquí da los mismo, y les dicen a las personas vaya y reclame al Sernac o vaya al Sernac Financiero, ahora un Sernac en la educación que da exactamente lo mismo. Ya estamos tan desinformados que si la gente fuera consumidores informados verían las miles de quejas que hay en las redes sociales. Nos tienen tan controlados que ya solo estamos preocupados de la farándula y las promesas de los políticos que siguen pensando que somos ignorantes.
Es importante ajustar el enfoque cuando mucha gente viaja a diferentes países y culturas, pero si quieren aprender les debe doler el bolsillo. Estoy seguro, que si aquí multaran a los que contaminan duramente, o cometen delitos legítimos de dolo como “La Polar”, o el perdón del SII a grandes empresas, el INE ni hablar, fuesen castigados, nuestro país sería diferente. Al padre Berrios lo castigan porque dice la verdad.
En el mundo por experiencias de trabajo y de interactuar con diferentes culturas, se encuentra un denominador común: es fundamental aprender lo básico y adaptarse a su entorno. La verdad se lidia con gente seria y con voluntad. El espíritu y la fiesta a los que les gustan las cosas fáciles terminaron porque su espíritu “está muerto”, y si alguna vez lo tuvieron, lo perdieron. “En general estamos construyendo un nido de mediocres y la gente con clase, con integridad y que quieren que se vayan a sus casas con la cola entre las piernas”, están muy equivocados, porque nadie puede matar el espíritu de esa gente, nadie puede eliminar la integridad de los verdaderos líderes y de las personas decentes y dignas. No hay nada como un espíritu amputado. No hay ningún remedio para eso y la gente los va a castigar.
Cuando llegué a nuestro país, escuché decir: “Seremos la mejor región, el mejor país, un centro de referencia para Latinoamérica y el mundo, fabricantes de profesionales, líderes íntegros, éticos”.
Hay que tener cuidado con el tipo de líderes que se van a producir en el futuro. No soy juez o un jurado, la gente juzgará a los políticos, intelectuales y autoridades. La verdad y la integridad no se transa ni se vende: hay gente que no vende su futuro o su libertad por ningún precio. Eso se llama integridad, valor, coraje, profesionalismo. Esa es la materia con que se deben hacer los líderes de hoy. Estamos en un periodo muy difícil. Pero siempre los que actúan con la verdad saben cuál es el camino correcto que tomar. Sin excepción, y siempre si alguien “duda” es porque está tomando una muy mala decisión. La vejez es larga y lenta, allá cuando estén solos postrados en una cama, su conciencia los va a castigar. Su peor castigo. Por ello, les pido a todos que hagan las cosas bien ahora y no tengan que arrepentirse después. Si hace algo, hágalo bien desde un principio, aunque les duela el bolsillo.
Mantener el equilibrio puede ser un reto casi imposible cuando la vida parece girar completamente al revés. Pienso que en nuestro país estamos en este punto en que hay algo que nos hace dudar y desconfiar de todos. Personas que deben ir a la UTI, les dan una aspirina y terminan en la sala de emergencia y en cuatro semanas regresan casi moribundas y les dicen que parece que hubo un error. Pero en lugar de ser llevado a donde le corresponde, terminan en cualquier lugar, seas rico o pobre, aquí da los mismo, y les dicen a las personas vaya y reclame al Sernac o vaya al Sernac Financiero, ahora un Sernac en la educación que da exactamente lo mismo. Ya estamos tan desinformados que si la gente fuera consumidores informados verían las miles de quejas que hay en las redes sociales. Nos tienen tan controlados que ya solo estamos preocupados de la farándula y las promesas de los políticos que siguen pensando que somos ignorantes.
Es importante ajustar el enfoque cuando mucha gente viaja a diferentes países y culturas, pero si quieren aprender les debe doler el bolsillo. Estoy seguro, que si aquí multaran a los que contaminan duramente, o cometen delitos legítimos de dolo como “La Polar”, o el perdón del SII a grandes empresas, el INE ni hablar, fuesen castigados, nuestro país sería diferente. Al padre Berrios lo castigan porque dice la verdad.
En el mundo por experiencias de trabajo y de interactuar con diferentes culturas, se encuentra un denominador común: es fundamental aprender lo básico y adaptarse a su entorno. La verdad se lidia con gente seria y con voluntad. El espíritu y la fiesta a los que les gustan las cosas fáciles terminaron porque su espíritu “está muerto”, y si alguna vez lo tuvieron, lo perdieron. “En general estamos construyendo un nido de mediocres y la gente con clase, con integridad y que quieren que se vayan a sus casas con la cola entre las piernas”, están muy equivocados, porque nadie puede matar el espíritu de esa gente, nadie puede eliminar la integridad de los verdaderos líderes y de las personas decentes y dignas. No hay nada como un espíritu amputado. No hay ningún remedio para eso y la gente los va a castigar.
Cuando llegué a nuestro país, escuché decir: “Seremos la mejor región, el mejor país, un centro de referencia para Latinoamérica y el mundo, fabricantes de profesionales, líderes íntegros, éticos”.
Hay que tener cuidado con el tipo de líderes que se van a producir en el futuro. No soy juez o un jurado, la gente juzgará a los políticos, intelectuales y autoridades. La verdad y la integridad no se transa ni se vende: hay gente que no vende su futuro o su libertad por ningún precio. Eso se llama integridad, valor, coraje, profesionalismo. Esa es la materia con que se deben hacer los líderes de hoy. Estamos en un periodo muy difícil. Pero siempre los que actúan con la verdad saben cuál es el camino correcto que tomar. Sin excepción, y siempre si alguien “duda” es porque está tomando una muy mala decisión. La vejez es larga y lenta, allá cuando estén solos postrados en una cama, su conciencia los va a castigar. Su peor castigo. Por ello, les pido a todos que hagan las cosas bien ahora y no tengan que arrepentirse después. Si hace algo, hágalo bien desde un principio, aunque les duela el bolsillo.
No comments:
Post a Comment